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acepcion
Hilada de ladrillos horizontal, entre otras de diferentes materiales.
obra
El Verdugo - junto al Trovador, el Caballero florentino, el Veneciano y el Condesito - forma parte de la serie de acuarelas realizada por Fortuny en 1865 para presentar diferentes figuras ataviadas con sus característicos ropajes, demostrando en todas ellas su facilidad con el dibujo y el detallismo minucioso a pesar de la dificultad de la técnica elegida. Los personajes se sitúan ante un fondo neutro en el que apenas existen referencias espaciales - que recuerda a Velázquez - iluminados por un potente foco de luz que resalta su volumetría y el colorido de sus trajes. La anatomía musculosa de esta figura recuerda a Miguel Ángel, pudiendo tratarse de un homenaje al pintor florentino.
lugar
La villa de Verdun se encuentra situada al borde del río Meuse, en la región de Lorraine, al noreste de Francia y lindando con la frontera de Luxemburgo. Los orígenes del núcleo urbano hay que buscarlos hace dos mil años aproximadamente. La presencia humana en la región se remonta al Paleolítico, entre los 300 y los 400 mil años. El Museo de la Princerie conserva los vestigios dejados por el hombre Paleolítico en la región, como puntas de flecha, útiles o sílex, entre otros. Su localización sobre un peñasco rocoso dominando el río es el que le ha dado su nombre, de origen celta, dunum, que significa fortaleza. Fue un oppidum celta y, posteriormente, un castro romano, antes de ser invadida por los galos. Verdún fue evangelizada en el siglo IV, y fue allí donde los nietos de Carlomagno firmaron los Tratados por los que el Imperio quedaba dividido en tres. Durante la Edad Media fue un importante centro comercial y cultural, gracias a su estratégica posición cerca de la frontera, en la ruta comercial entre el norte y el sur de Europa. Pero si por algo es verdaderamente conocida Verdun es por haber sufrido uno de los peores asedios de la Historia, entre febrero y diciembre de 1916. La batalla de Verdun ha sido la más sangrienta de la Historia, ya que en ella murieron 300.000 hombres, entre franceses y alemanes. La batalla dejó la ciudad prácticamente destruida, siendo reconstruida a lo largo del siglo XX. Actualmente, el centro de la villa se caracteriza por su animación, albergando numerosos conciertos, y por tener un cierto aire a pequeña ciudad-balneario.
fuente
Piezas de madera (hoy de metal o fibra), que se sujetan a los palos y sirven para colgar las velas; sus extremos o puntas se llaman penoles.
Personaje Literato
Sus inicios literarios nada tienen que ver con el estilo que le definiría posteriormente. Las primeras obras de su puño -"Storia di una capinera", "Nedda"- se asemejan a los folletines franceses. Con cuarenta años su obra experimenta un giro y comienza a escribir relatos más sencillos basados en la vida rural siciliana. Estas novelas le consagrarían como el precursor del realismo italiano. De este tiempo son: "La vita dei campi", "Cavalleria rusticana", "La terra trema" y "Maese don Gesualdo".
contexto
Antigua población guipuzcoana, fue en el siglo XIII cuando, debido a su importancia, Alfonso X le concede el título de villa. El papel más importante de Vergara en el conjunto de la Historia e España acaece en los últimos siglos. Durante el XVIII, el nombre de la localidad será muy conocido gracias al Seminario Patriótico de Vergara que allí se funda, a cargo de la Real Sociedad Bascongada de Amigos del País. El Seminario se instala en 1776 en el antiguo colegio de los jesuitas, construido en el siglo XVI, y es más tarde rebautizado como Seminario de Nobles, institución que había de convertirse en uno de los más importantes centros de enseñanza e investigación de la España ilustrada, con sus estudios de primeras letras, humanidades, matemáticas y física, y con sus cátedras de química y mineralogía, donde se produjeron algunos de los descubrimientos científicos que desde el interior del país alcanzaron verdadera resonancia europea. En el ámbito de la química y la mineralogía, se obtendrían algunos de los mayores éxitos de la ciencia española del XVIII, gracias a las investigaciones de Ignacio de Zavalo (que obtiene un acero colado y cementado que se juzga tan bueno como el de Inglaterra), del francés François Chabaneau (que consigue la purificación de la platina, provocando la intensa emoción y el correspondiente escrito elogioso de Valentín de Foronda) y de los hermanos Fausto y Juan José Delhuyar (habitualmente transcrito de Elhúyar), el primero de los cuales trabajó con el químico francés sobre el platino, mientras el segundo obtenía el aislamiento del tungsteno o wolframio. Valentín de Foronda -traductor de relevantes obras francesas, difusor del pensamiento de Condillac y uno de los máximos representantes del preliberalismo español-; el literato Félix María de Samaniego; el conde de Peñaflorida y su hijo, Ramón de Munibe -impulsores de la Ilustración-; Manuel Ignacio de Altuna, Vicente María Santiváñez - profesor de elocuencia en Vergara, traductor de Marmontel y de Pope y firme defensor del pensamiento revolucionario francés- o José Agustín Ibáñez de la Rentería -introductor de Montesquieu-, son algunos de los nombres ligados al Seminario de Vergara. Los acontecimientos del siglo XIX hacen de Vergara uno de los escenarios donde se proclamaron Juntas Generales, durante la ocupación francesa. Durante la primera guerra carlista, en la que, a la muerte de Fernando VII, se disputaron la sucesión al trono español el infante Carlos y las tropas de María Cristina y su hija Isabel, Vergara fue uno de los lugares donde se desarrollaron los combates, entre 1833 y 1835. Posteriormente, en Vergara tuvo lugar la firma del Tratado de paz entre ambos contendientes, el Convenio de Vergara (29 de agosto de 1839), sellado por los generales Espartero y Maroto. Aparte del citado edificio de los jesuitas, sede del Seminario, en Vergara hay que destacar otras joyas arquitectónicas como el Palacio Izaguirre-Moia (siglo XV, reconstruida en el XVIII); la Casa Arrese (siglo XVI); la Casa Aróstegui (siglo XVI) o la Casa Irizar, palacio de finales del XVIII. Es notable también el edificio de su Ayuntamiento, de fines del siglo XVII. La arquitectura religiosa está representada por dos iglesias, la de San Pedro Ariznoa, y la de Santa María de Oxirondo -medieval, reedificada en el siglo XVI-, y el Convento de la Trinidad, de 1591.
lugar
Personaje Escultor
Su formación artística discurre bajo los consejos de su progenitor, Francisco Vergara, y Evaristo Muñoz. Entre sus creaciones iniciales destaca la figura de Santa Rita de Casia. Fue uno de los principales motores que impulsó la fundación de la Academia de Santa Bárbara en Valencia. De esta institución, más tarde bautizada como Academia de San Carlos, fue elegido responsable de la sección de escultura y luego director. En Valencia dejó un extenso legado, del que se pueden citar obras como el relieve de San Antonio Abad de la iglesia de San Martín o la fachada del Palacio del marqués de Dos Aguas.
Personaje
Mujer del conquistador Juan de Padilla y Chávez, extremeño, que participó en la conquista de Centroamérica. Su hijo, el capitán Juan de Padilla, nació en Nicaragua, de lo que se deduce que al menos algún tiempo, Isabel de Vergara vivió allí.
Personaje Pintor
Su educación discurre de la mano de su padre, Francisco Vergara, escultor de profesión. Participó en la fundación de la Escuela de Nobles Artes de Valencia. De su producción hay que destacar Los martirios de San Vicente, La historia de San Luis Obispo, una Purísima Concepción y un Descendimiento de la Cruz, entre otras muchas obras. En la Real de San Carlos fue director de Pintura y Académico de Mérito de San Fernando.