Corriente filosófica grecorromana que se traducía en una forma de vida basada en la virtud y la autosuficiencia. Este pensamiento tuvo una gran aceptación en la política y sociedad romana.
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acepcion
Escuela filosófica griega fundada por Zenón de Citio. El auge de esta doctrina coincidió con la desintegración del sistema político griego.
contexto
Anexionados por la URSS en 1940, estos países fueron conducidos fácilmente a la guerra contra los soviéticos por los alemanes en 1941. Los alemanes, antiguos dominadores de los territorios bálticos, no gozaban de grandes simpatías entre la población. Cuando constataron que los alemanes no iban a devolverles la independencia, sino a incluirlas en un territorio del Reich -el Ostland- (20), y a establecer en sus países nuevamente a colonos alemanes, la hostilidad aumentó. Y no dejó de crecer cuando se inició la política antijudía y, sobre todo, cuando se decidió enrolar a los bálticos en el Ejército alemán o en los batallones de trabajo. Con todo, en Estonia tuvo éxito el plan de reclutamiento para las SS o las unidades de trabajo. En Letonia el éxito fue menor; y en Lituania muy escaso, con la consiguiente represión. Las derrotas alemanas en la URSS atemorizaron a los bálticos, y la leve agitación antialemana aumentó, pero nunca aparecerá algo que pueda denominarse resistencia, ni siquiera oposición, y serán los soviéticos quienes liberen a estos tres países, que luego serán integrados de nuevo en la URSS.
contexto
ESTOY TRISTE Estoy triste, me aflijo, yo, el señor Nezahualcóyotl. Con flores y con cantos recuerdo a los príncipes, a los que se fueron, a Tezozomoctzin, a Quahquauhtzin. En verdad viven, allá en donde de algún modo se existe. ¡Ojalá pudiera yo seguir a los príncipes, llevarles nuestras flores! ¡Si pudiera yo hacer míos los hermosos cantos de Tezozomoctzin! Jamás perecerá tu nombre, ¡oh mi señor, tú, Tezozomoctzin! así, echando de menos tus cantos, me he venido a afligir, sólo he venido a quedar triste, yo a mí mismo me desgarro. He venido a estar triste, me aflijo. Ya no estás aquí, ya no, en la región donde de algún modo se existe, nos dejaste sin provisión en la tierra, por esto, a mí mismo me desgarro. YO LO PREGUNTO Yo, Nezahualcóyotl, lo pregunto: ¿Acaso de veras se vive con raíz en la tierra? No para siempre en la tierra: sólo un poco aquí. Aunque sea de jade se quiebra, aunque sea oro se rompe, aunque sea plumaje de quetzal se desgarra. No para siempre en la tierra: sólo un poco aquí. PERCIBO LO SECRETO... Percibo lo secreto, lo oculto: ¡Oh vosotros señores! Así somos, somos mortales, de cuatro en cuatro nosotros los hombres, todos habremos de irnos, todos habremos de morir en la tierra... Nadie en jade, nadie en oro se convertirá: en la tierra quedará guardado. Todos nos iremos allá, de igual modo. Nadie quedará, conjuntamente habrá que perecer, nosotros iremos así a su casa. Como una pintura nos iremos borrando. Como una flor, nos iremos secando aquí sobre la tierra. Como vestidura de plumaje de ave zacuán, de la preciosa ave de cuello de hule, nos iremos acabando nos vamos a su casa. Se acercó aquí hace giros la tristeza de los que en su interior viven... Meditadlo, señores, águilas y tigres, aunque fuerais de jade, aunque fuerais de oro también allá iréis, al lugar de los descarnados... Tendremos que desaparecer nadie habrá de quedar. ESTOY EMBRIAGADO... Estoy embriagado, lloro me aflijo, pienso, digo, en mi interior lo encuentro: si yo nunca muriera, si nunca desapareciera. Allá donde no hay muerte, allá donde ella es conquistada, que allá vaya yo... Si yo nunca muriera, si yo nunca desapareciera. ¿A DÓNDE IREMOS? ¿A dónde iremos donde la muerte no existe? Mas, ¿por esto viviré llorando? Que tu corazón se enderece: Aquí nadie vivirá para siempre. Aun los príncipes a morir vinieron, los bultos funerarios se queman. Que tu corazón se enderece: aquí nadie vivirá para siempre. LO COMPRENDE MI CORAZÓN Por fin lo comprende mi corazón: escucho un canto, contemplo una flor: ¡Ojalá no se marchiten! NO ACABARÁN MIS FLORES... No acabarán mis flores. No cesarán mis cantos. Yo cantor los elevo, se reparten, se esparcen. Aun cuando las flores se marchitan y amarillecen, serán llevadas allá, al interior de la casa del ave de plumas de oro. CON FLORES ESCRIBES... Con flores escribes, Dador de la vida, con cantos das color, con cantos sombreas a los que han de vivir en la tierra. Después destruirás a águilas y tigres, sólo en tu libro de pinturas vivimos, aquí sobre la tierra. Con tinta negra borrarás lo que fue la hermandad, la comunidad, la nobleza. Tú sombreas a los que han de vivir en la tierra. EN EL INTERIOR DEL CIELO... Sólo allá en el interior del cielo tú inventas tu palabra, ¡Dador de la vida! ¿Qué determinarás? ¿Tendrás fastidio aquí? ¿Ocultarás tu fama y tu gloria en la tierra? ¿Qué determinarás? Nadie puede ser amigo del Dador de la vida... Amigos, águilas, tigres, ¿a dónde en verdad iremos? Mal hacemos las cosas, oh amigo. Por ello no así te aflijas, eso nos enferma, nos causa la muerte. Esforzaos, todos tendremos que ir a la región del misterio. ¿ERES TÚ VERDADERO...? ¿Eres tú verdadero (tienes raíz)? Sólo quien todas las cosas domina, el Dador de la vida. ¿Es esto verdad? ¿Acaso no lo es, como dicen? ¡Que nuestros corazones no tengan tormento! Todo lo que es verdadero, (lo que tiene raíz), dicen que no es verdadero (que no tiene raíz). El Dador de la vida sólo se muestra arbitrario. ¡Que nuestros corazones no tengan tormento! NO EN PARTE ALGUNA... No en parte alguna puede estar la casa del inventor de sí mismo. Dios, el señor nuestro, por todas partes es invocado, por todas partes es también venerado. Se busca su gloria, su fama en la tierra. Él es quien inventa las cosas, él es quien se inventa a sí mismo: Dios. Por todas partes es invocado, por todas partes es también venerado. Se busca su gloria, su fama en la tierra. Nadie puede aquí, nadie puede ser amigo del Dador de la vida: sólo es invocado, a su lado, junto a él, se puede vivir en la tierra. El que lo encuentra, tan sólo sabe bien esto: él es invocado, a su lado, junto a él, se puede vivir en la tierra. Nadie en verdad es tu amigo, ¡oh Dador de la vida! Sólo como si entre las flores buscáramos a alguien, así te buscamos, nosotros que vivimos en la tierra, mientras estamos a tu lado. Se hastiará tu corazón. Sólo por poco tiempo estaremos junto a ti y a tu lado. Nos enloquece el Dador de la vida, nos embriaga aquí. Nadie puede estar acaso a su lado, tener éxito, reinar en la tierra. Sólo tú alteras las cosas, como lo sabe nuestro corazón: nadie puede estar acaso a su lado, tener éxito, reinar en la tierra.
Personaje
Científico
Literato
Entre los geógrafos más importantes de la época romana encontramos al griego Estrabón. Aficionado a los viajes, recorrió la mayor parte de las regiones orientales del Imperio. Durante su larga estancia en Roma escribió su "Geografía" donde describe de manera pormenorizada las costumbres, gentes, instituciones y anécdotas de las tierras europeas, desde Irlanda al Cáucaso. Sus "Memorias históricas" se han perdido.
Personaje
Político
Presidente de Cuba en el año 1876. Al año siguiente fue deportado a España. Se trasladó a Estados Unidos tras la Paz de Zanjón ocupando el cargo de delegado del Partido Revolucionario Cubano. De vuelta a Cuba en 1902, fue de nuevo elegido presidente, cargo que ocupó hasta que, por conflictos con los revolucionarios que no apoyaron su reelección y tras solicitar ayuda a los Estados Unidos, tuvo que dimitir.
obra
Un bombardeo contra la población civil es el tema elegido por Goya para esta estampa, mostrando en toda la serie los estragos del conflicto desde el fusilamiento - No se puede mirar - a la violación - Ya no hay tiempo -. Con estas estampas el pintor quiere exhibir la sinrazón y la crueldad de la guerra, convirtiéndose la serie en intemporal, desgraciadamente.
contexto
Esta cosmovisión, de simplicidad y brutalidad extremas, no carecía de cierta lógica interna, y tuvo consecuencias catastróficas cuando pasó a inspirar la política exterior de una gran potencia. Hoy los historiadores coinciden en que la política exterior hitleriana, a pesar de todo su oportunismo y de su maniobrabilidad táctica, estuvo determinada por una serie de ideas más o menos fijas a las que Hitler se atuvo con singular tenacidad. Estas ideas cristalizaron en un programa, en una secuela deseada de acontecimientos, que el Führer entendía realizar en su vida sólo en parte. Posteriormente, el programa sufrió una aceleración y Hitler se lanzó, decidido, a la consecución lo más amplia posible del mismo. Dicho programa estaba alentado por un número reducido de nociones básicas: conquista de espacio vital, predominio racial y aspiración al establecimiento de una posición dominante para el Tercer Reich, merced a su superioridad biológica. Como punto de partida, el programa subrayaba, en primer lugar, la necesidad de consolidación interna de la nueva Alemania: rearme material y sicológico, unificación de todos los territorios poblados por alemanes. En paralelo se desarrollaría una política de alianzas con Italia e Inglaterra, que permitiría destruir a Francia como potencia militar y dar al traste con la pequeña Entente, abriendo Checoslovaquia, Rumania, Polonia y los Estados bálticos a la dominación alemana. De tal suerte quedaría expedito el camino para proceder a la conquista de Rusia. El dominio sobre el continente europeo, aliado a Inglaterra o seguro de su neutralidad, era, en la opinión de Hitler, la tarea de su vida. Se trataba de una misión gigantesca, al término de la cual refulgía la trituración del refugio del bolchevismo y del judaísmo, en el que el pueblo alemán encontraría un espacio considerado esencial. Hildebrand ha sistematizado en tres etapas el programa de Hitler: - Creación de un núcleo de poder de proyección mundial centrado en Europa. - Expansión ultramarina, bien al lado de Inglaterra o en lucha contra ella, llegando a una confrontación, inevitable, con los Estados Unidos, entendida como un combate por la supremacía mundial entre Europa y América. - Dominación alemana sobre el planeta: el predominio racial del pueblo alemán garantizaría tal situación y la perpetuaría: similar a un dios, el "hombre nuevo" preservaría este predominio mundial de la sangre germánica, oponiéndose a todo cambio. La historia mundial alcanzaría así su final y la dinámica del proceso histórico se congelaría en la estática, biológicamente fijada, de la utopía. Pero Inglaterra no se comportó con arreglo al programa, por lo que Hitler se vio obligado a modificar éste, en el sentido de comprimir el plan de varias etapas, que se extendía a lo largo de amplios períodos de tiempo en los que él ya no viviría. Merced a los retoques ulteriores, cabe reconocer, al lado de la primera fase (continental), los esbozos de la segunda -ultramarina y atlántica- incluso los atisbos del camino en pos de la tercera -de hegemonía-, en la aceleración propinada a los planes de expansión imperialista a partir de 1941, tras el ataque alemán a la Unión Soviética, Para abordar este último con éxito -y con independencia del globalismo de las metas finales, que ha dado origen a una intensa discusión entre los historiadores-, Hitler entendía que era necesario evitar una guerra de coalición contra Alemania. La marcha hacia la realización de la primera fase de sus ambiciosos planes se basaría, pues, en la consecución de una serie de victorias en guerras parciales y localizadas que pudieran alcanzarse en campañas cortas y rápidas. Esta noción se materializó en la noción de la Blitzkrieg o guerra relámpago. Como ha puesto de relieve Leach, la Blitzkrieg no era para Hitler una mera conceptualización militar, una aplicación táctica de los resultados de la mecanización de las fuerzas armadas para evitar la guerra de trincheras, que había resultado tan costosa en hombres y material en el primer conflicto mundial. Era una idea diseñada precisamente para evitar los lastres económicos, políticos y sicológicos de esta última. A diferencia de Ludendorff, cuya noción de la guerra total era la coordinación de todos los aspectos de la vida nacional en un esfuerzo militar supremo, titánico, Hitler entendía que Alemania no estaría en condiciones de enfrentarse, en un primer momento, a todas las fuerzas que contra ella se movilizaran en Europa si utilizaba exclusivamente medios militares. De aquí la importancia que correspondía a la propaganda, a la subversión, a la presión diplomática, al chantaje: todos ellos eran mecanismos destinados a reducir la voluntad de resistencia del adversario, tras lo cual el golpe final lo asestaría una Wehrmacht renovada, a la cabeza de la cual se situarían unidades móviles especialmente cualificadas. La guerra relámpago sería rápida y sangrienta y su resultado dependería críticamente del momento en que se adoptase la decisión de iniciarla. Hitler consideraba que ello dependía de su genio político y estratégico. La Blitzkrieg era el medio para un fin.