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lugar
contexto
El solar que ocupa la ciudad actual de Castellón está desplazado unos ocho kilómetros del original. La primitiva localidad se hallaba asentada sobre una colina, el cerro de la Magdalena, presidida por un castillo -el Fadrell-, habiendo sido fundada por los árabes. Su función era la de servir de avanzadilla hacia la llanura. Tras ser conquistada por Jaime I en el año 1233, el 8 de septiembre de 1251 este mismo monarca concede permiso para que sea trasladada al llano, circunstancia que, según la tradición, ocurrirá el tercer domingo de Cuaresma de 1.252. La localidad y sus terrenos adyacentes le fueron donados a Ximén Pérez d'Arenós. En la Edad Media Castellón fue dotada con fosos, murallas y torres, siendo también construida la iglesia. Esta será concatedral a partir del siglo XV. En los siglos XVII y XVIII Castellón se ve envuelta en las revueltas llamadas germanías. Durante la guerra de Sucesión, que enfrenta al futuro Felipe V con el archiduque Carlos de Austria, Castellón toma partido a favor de éste, siendo ocupadas por las tropas del primero. La expansión urbana durante el XIX, común a toda España. Hace que se derriben sus murallas, que caen ante el crecimiento de la mancha urbana. Este desarrollo se verá frenado por las guerras de independencia y carlistas. Por esta última la reina Isabel II le concederá el título de Fiel y Leal ciudad. En 1833 Castellón será designada capital de la provincia del mismo nombre. Al mismo tiempo va experimentando una lenta modernización, con la construcción de nuevos edificios como el Hospital Provincial, el Casino, el Teatro Principal o el Parque Ribalta. Su puerto es remozado y llega el ferrocarril, dando salida a la producción de su importante industria cerámica y azulejera.
lugar
Conjunto de asentamientos pertenecientes al Bronce Antiguo italiano (1900-1500 a.C.), en el sureste de Sicilia. Comprenden poblados ubicados en zonas elevadas, algunos rodeados de murallas, con cabañas de planta oval y rectangular. Las prácticas de enterramiento se realizaban en cuevas artificiales, en cámaras ovales o circulares, ocasionalmente con antecámara. Algunas tumbas fueron cerradas mediante losas con motivos decorativos en espiral. Los individuos fueron enterrados con objetos de cerámica como vasos geminados, ánforas o copas de pie cónico, así como broches de cinturón, puñales de cobre y placas de hueso con protuberancias, identificadas como ídolos.
monumento
Yacimiento romano situado a cuatro kilómetros del núcleo urbano. Su extensión es de casi 1.400 m. cuadrados y en su terreno se distinguen construcciones correspondientes a dos fases diferentes; la primera de ellas, a los siglos I - II d.C., formado por un conjunto de habitaciones articuladas en torno a dos grandes habitaciones rectangulares. El segundo nivel pertenece al siglo III, levantado tras ser arrasado todo el conjunto antiguo debido a las necesidades defensivas de la población, levantándose un recinto amurallado de planta cuadrada, con torres cuadradas en las esquinas. El Castellum de Santillán fue una fortificación romana reutilizada posiblemente en etapa andalusí y prácticamente destruida tras la conquista cristiana.
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obra
La Historia de José es uno de los episodios bíblicos de mayor éxito entre los pintores del Barroco. El propio Velázquez realizó unos lienzos sobre el tema, también Ribera y otros. Antonio del Castillo, autor de este cuadro, recurre para pintar la serie de la Historia de José a un estilo más blando y luminoso que el que podemos apreciar en la Adoración de los Pastores. Probablemente, para estas obras recurre al modelo de Murillo, mucho más suave en la ejecución que un maestro como Zurbarán. La Castidad de José se refiere al intento de seducción que sufrió y que su integridad le indujo a rechazar, pues reconocía el pecado en la mujer.
Personaje Político
Estudió el doctorado en Leyes en la Universidad de Madrid y luego se trasladó a París, Cambridge y Ginebra para ampliar sus estudios. Desempeñó importantes cargos. Fue vicepresidente de la Confederación Nacional de Estudiantes Católicos y Catedrático de Derecho Internacional Público. Más tarde, trabajó en el diario "El Debate", donde dirigió la sección de política exterior. Cuando se inició la guerra civil en 1936 logró escapar de Madrid, donde se encontraba en aquel momento, y alcanzar la zona nacional para ingresar en este bando. Tras el final de la contienda, fue nombrado catedrático de Estudios Superiores de Derecho Internacional de la Universidad de Madrid e ingresó en la Tribunal Permanente de Arbitraje Internacional de La Haya. A partir de este momento su carrera experimenta un rápido ascenso, hasta que inicia su carrera diplomática como embajador de Perú. Luego fue destinado a la Santa Sede y, más tarde, encabezó la cartera de Asuntos Exteriores. Perteneció a la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas. En 1941 compartió el Premio Nacional de Literatura con José María Areilza por su obra "Reivindicaciones de España".