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obra
Daumier fue un realista satírico que utilizó la litografía con fines políticos, unas veces para ridiculizar y otras para denunciar los atropellos del poder. En este caso se basa en un acontecimiento real ocurrido en los barrios obreros de París, donde fueron masacrados todos los vecinos de una casa desde la que un francotirador disparó a un soldado del ejército de Luis Felipe. Daumier trata de reproducir el horror de la matanza y denunciar la brutalidad de aquella injusticia.
obra
El poeta Bernard escribe en 1904 sobre la fórmula de trabajar de Cézanne: "Su método de trabajo era muy particular, totalmente diferente a los usuales y extraordinariamente complicado. Comenzaba por las partes sombreadas colocando una mancha sobre la cual ponía una segunda, más grande, luego una tercera, hasta que todas estas tonalidades, recubriéndose unas a las otras, hubieran modelado el objeto por medio de su coloración. Comprendí entonces que una ley de la armonía guiaba su trabajo y que todas sus modulaciones tenían una dirección trazada de antemano en su cabeza". Con esta técnica del color, Cézanne encontraba la fórmula para crear una composición en la que las formas sean reconocibles, alcanzando la unión armoniosa de todos los elementos pictóricos. Estos planteamientos se ponen de manifiesto en este paisaje de los alrededores del Château Noir, una finca cercana a Aix propiedad de un comerciante de carbón por la que el maestro se sintió especialmente atraído durante los últimos años de su vida. No sólo nos presentará el edificio entre árboles sino que cada uno de los rincones de su entorno serán escrutados por la mirada del pintor, buscando en ellos recuperar el volumen y la forma a través del color. Las pinceladas fluidas con las que son aplicadas las escasas tonalidades ayudan a configurar una estructura geométrica en la composición, suponiendo un evidente punto de partida para el cubismo. Las marcadas líneas negras con las que delimita los contornos también serían utilizadas por Gauguin y Van Gogh lo que hace de Cézanne un punto de referencia tanto para los post-impresionistas como para la cercana vanguardia: fauvistas y expresionistas.
Personaje Pintor
Rueda se inicia en el mundo de la pintura a los 20 años cuando emprende estudios de pintura clásica. Artista precoz, a los 23 años ya organiza su primera exposición en Madrid, en la prestigiosa galería de la "Revista de Occidente". Su estilo sufre un significativo cambio al interesarse por la abstracción y el collage. En 1960 fue el artista elegido en la Bienal de Venecia. Rueda, junto a Zóbel, será el promotor del Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca. Sus obras han sido expuestas en las más prestigiosas salas del mundo y los museos más importantes de arte contemporáneo poseen alguno de sus trabajos. También se ha interesado por la escultura y el relieve, arte que se relaciona perfectamente con la búsqueda de la tercera dimensión que será uno de los objetivos de su pintura. En 1995 recibió el nombramiento de Académico de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.
Personaje Literato
Nacido en Sevilla en 1510, en el seno de una familia de orfebres, poco se sabe de su infancia y juventud. Está documentado que en 1551 el Ayuntamiento de Valladolid edificó un corral de comedias para él, que en 1554 actuó para Felipe II y que en 1559 efectuó las representaciones del Corpus en Sevilla. Elogiado por Cervantes, asimiló las técnicas de la "commedia dell´arte. Entre sus obras cabe distinguir comedias y pasos. De las primeras sobresalen "Eufemia", "Armelinda", "Medora", "Los engañados". De las segundas, es preciso destacar "La carátula", "El convidado", "La tierra de Jauja" o "Las aceitunas". Su género es populista, buscando la gracia y la aprobación del público, costumbrista, constituyendo un antecedente de los entremeses cervantinos. Su prosa es una herramienta de extraordinaria utilidad para conocer el castellano de la época.
termino
acepcion
Circulo de piedra con carácter sagrado, donde los nativos norteamericanos se reúnen para la celebración de rituales.
obra
El Armario de la plata daba comienzo con esta interpretación simbólica del cielo, según el Libro de Ezequiel, uno de los cuatro profetas mayores del Antiguo Testamento. En el arco exterior de la Rueda mística figuran los profetas de los tiempos antiguos, que portan filacterias y están representados con los atributos habituales de la iconografía bíblica. En el círculo menor, también separados por las franjas donde se muestra su identificación, se presentan algunos apóstoles y evangelistas, recortados sus volúmenes sobre el fondo celeste, al contrario que la faja exterior, que exhibe detalles más naturalistas de formas vegetales. Fuera de la Rueda en llamas, la escena queda enmarcada en su base por Ezequiel, a la derecha, recostado y de movimiento sobrecogedor ante la visión mística. A la izquierda, San Gregorio, trasunto de la nueva Iglesia católica. En la parte de arriba, los pergaminos inscriben citas del Antiguo y Nuevo Testamento, siguiendo la distribución de las figuras de abajo, respectivamente. El lenguaje simbólico del libro del profeta se presenta en esta escena con el mismo carácter conceptual.