Quinquerreme, navío con tres órdenes de remos, en la que las dos filas superiores llevaban dos remeros por pala y la inferior, uno. Fueron especialmente famosas las cartaginesas, de quienes las copiaron los romanos.
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acepcion
Así se denomina a la galera de origen griego que dispone de cinco filas de remeros a cada lado de la sección.
obra
Fresco pintado en la cúpula central de la iglesia de la abadía de Ottobeuren por este tirolés discípulo de Paul Troger. Zeiller utiliza la arquitectura fingida con una perspectiva para ser vista desde la entrada. En su obra se opera la síntesis de los decoradores venecianos y romanos. Los colores claros armonizan perfectamente con el conjunto.
obra
A lo largo de su vida Manet realizó numerosas naturalezas muertas protagonizadas por flores en jarrones recortados sobre un fondo neutro. La inspiración la buscó en la pintura holandesa del Barroco que pudo admirar en el Louvre y en el gran Chardin. La novedad que incorpora Manet es el estilo más suelto, con mayores dosis de abocetamiento, dejando de lado la calidad fotográfica de los objetos. El colorido empleado es muy vivo, destaca la tonalidad rosa que contrasta con la mesa y el fondo, juego de contrastes de gran atractivo para el maestro.
acepcion
Son los mechones de cabello que se dejan crecer los judíos sobre los lados. El origen de esta costumbre se sitúa en Polonia o Yemen.
obra
Pepe Hillo fue el torero sevillano más famoso de su tiempo, destacando por escribir un tratado sobre Tauromaquia en el que Goya se inspiró a la hora de hacer algunas estampas de esta serie. El recorte que está realizando el torero al bicho fue una de las especialidades del diestro, captado en el momento de rendir pleitesía al animal.
Personaje
Otros
Su afición por el toreo comienza cuando todavía es un niño. En estos años entra en contacto con Costillares. Este quedó maravillado con los pases de José y le invitó a que formara parte de su cuadrilla. En 1770 debutaba en la plaza de toros de Córdoba. A partir de este momento inició una exitosa carrera, llegando a sustituir al propio Pedro Romero, que se convertiría en uno de sus mayores rivales. Torearon juntos en una corrida que se celebró en conmemoración de la subida al trono de Carlos IV. Se ganó el entusiasmo del público en el ruedo por el arte y la gracia de su toreo y las faenas que realizaba. Su figura quedó grabada para siempre en la obra de Goya. Pepe-Hillo publicó "La tauromaquia o el arte de torear", libro que dictó a José de la Tixera. En esta obra describía todos los secretos de este arte. Con la retirada de Pedro Romero se convirtió en la figura más importante de su tiempo. En 1801 murió toreando una vacada en Peñaranda de Bracamonte.