Cabeza de la reina Nefertiti

La Bruja, die Hexe, llaman los arqueólogos clásicos del Museo de Berlín a este famoso busto de Nefertiti

Nefertiti

Reina egipcia (siglo XIV a.C.) esposa de Amenofis IV.

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, esposa de Akhenaton

Amenofis IV

Faraón egipcio (1372-1354 a.C.) miembro de la XVIII Dinastía y sucesor de Amenofis III. Su reinado vendrá determinado por la reforma religiosa que hace de Atón el dios más importante, provocando un cisma con el poderoso clero de Amón. El pacifismo del rey será contrarrestado por los hititas que amplían sus territorios.

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. Son especialmente destacables por su modernidad las facciones del rostro: el cuello de cisne, los pómulos y el mentón provocativos. No menos actuales son el maquillaje de los ojos, el carmín de los labios y la tersura del cutis. Modelo que hizo el escultor Tutmés para otros retratos de la reina

Cabeza inacabada de la reina Nefertiti

Cabeza caliza parda inacabada, obra del escultor Tutmés, de la dinastía XVIII (1554- 1304 a.C.) se guarda en el Museo de El Cairo.

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, realizados en su taller de Amarna

La ciudad de Akhenatón

La ciudad construida por Amenofis IV-Akhenatón en la orilla derecha del Nilo tenía tres calles, aproximadamente paralelas al río, como las principales arterias en sentido norte-sur, y tres ramblas, perpendiculares a ellas, dividían la ciudad en tres sectores. Unicamente para el central se impuso un plano ordenador. Los otros dos quedaron a merced de los nuevos pobladores. Se implantó un módulo de casa individual, más parecida a una casa de campo que a una vivienda urbana. Las calles eran anchas y de aspecto moderno; no estaban pavimentadas, pero sí limpias de arena y de guijarros y orladas de árboles. Todas las casas podían abastecerse de agua del Nilo, entonces potable, o de pozos abiertos en sus proximidades.

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y tal vez por ser ese su único fin, no tuvo nunca puesto el ojo izquierdo, ni nadie se preocupó de llevarla consigo cuando Amarna y el taller de Tutmés quedaron abandonados para siempre. La caída sobre ella del edificio en que se encontraba apenas le produjo unas rozaduras, y en cambio protegió y conservó intactos sus colores. Además de sus collares de hojas de sauce, luce la reina un modelo de corona azul expresamente diseñado para ella, que llevaba el prótomo del uraeus resaltado sobre la frente y una banda policroma alrededor.