Chichén Itzá

Compartir


Datos principales


Tipo

Pueblo o ciudad

Antecesor

México

Localización


Desarrollo


Se localiza en las tierras bajas del norte de Yucatán, sobre más de 300 hectáreas de planicie calcárea y rodeada de vegetación. Representa el ejemplo más completo y espectacular de combinación entre cultura maya y tolteca. Floreció y alcanzó una notable extensión bajo el empuje de "colonizadores" procedentes de Tula. La ciudad tuvo su primer periodo importante en el Clásico tardío (600 - 900). Al final del Clásico se vio dominada por un importante grupo de filiación tolteca, proveniente del Altiplano mexicano, comenzando una nueva fase maya-tolteca a partir del año 969, con lo que se inicia una nueva etapa que la convirtió en capital regional, ya en el Postclásico. El territorio de la península del Yucatán carecía de agua corriente en la superficie, por lo que los cenotes fueron los únicos sitios donde el hombre podía obtenerla; de ahí el origen del nombre de la ciudad, chi (boca) y chen (pozo) que viene a significar "la boca del pozo de los itzaes o brujos del agua". A principios del siglo X cesaron en el área maya central las actividades culturales que habían caracterizado al período Clásico. En la península del Yucatán se produce la llegada de grupos extraños, encabezada por Kukulcán, personaje histórico cuyo nombre es la traducción a la lengua maya de Quetzalcoatl, "serpiente maya o emplumada"; por lo tanto, podría tratarse del mítico Ce Acatl Topiltzin. Las fuentes mayas (Chilam Balam) dicen que este personaje era de noble estirpe, culto y refinado, y habría sido expulsado de Tula por su malvado hermano Tezcatlipoca, huyendo al Yucatán.

Uno de los grupos que participó en la influencia de la Península es el de los Itzaes; grupo maya cuyas actividades se ampliaron a otros poblados como Itzamal y Motul, teniendo asiento también en Champotón y Mayapán. Las tres principales ciudades del Yucatán (Mayapán, Uxmal y Chichén Itzá) pactaron una alianza conocida como la Liga de Mayapán, que duró dos siglos. La última de ellas era la más importante del norte, donde se desarrolló una cultura de influencia tolteca, debido a que los itzaes trajeron ideas novedosas que se observaron en la arquitectura y el arte. A finales del siglo XII estalla un conflicto dentro de la alianza y Mayapán destruye Chichén Itzá, pasando su control a manos de la primera, hasta que, en 1441, la población sujeta a este gobierno se rebeló y, una vez derrotado, los centros quedaron abandonados. A partir de ese momento, Yucatán se dividió en señoríos de escasa trascendencia política y cultural, situación que encontraron los españoles a su llegada y que les facilitó su conquista y control. En la arquitectura de los Itzaes se nota la influencia de Tula, principalmente en la construcción de espacios interiores muy amplios y el uso de columnas en las entradas de los edificios que representan serpientes emplumadas. También se han conservado algunos de etapa Clásica. Varios son los grupos de edificios repartidos por toda la ciudad; el más extenso e importante se halla en el sector norte, entre el Cenote de los Sacrificios y el de Xtoloc, donde encontramos el Castillo (dedicado al dios Kukulcán), el Juego de Pelota más grande de toda América, el Templo de los Guerreros, el Tzompantli, el Templo de las Águilas y el Grupo de las Mil Columnas.

La característica fundamental de esta zona arqueológica es la estrecha unión existente entre arquitectura y sacrificios humanos, que siempre fueron practicados en Yucatán y cuyo ejemplo más claro era el Tzompantli, plataforma donde se colocaban los cráneos humanos decapitados. Llamar la atención también del llamado Caracol, edificio de etapa Clásica que cumplió funciones de observatorio durante el Postclásico. Se han conservado también algunos edificios de estilo Puuc, que recuerdan a los de Uxmal, como son la "Casa de las Monjas" y la "Casa Colorada". En Chichén Itzá se observa un cambio en algunas de las deidades, con la aparición de nuevos dioses (Kulkucán) y cultos (Cenote Sagrado); este último era un pozo de agua turbia al que se arrojaban víctimas preelegidas para complacer al dios pluvial Chac. Era también considerado la puerta de acceso al mundo de Ultratumba. Otras deidades mayas representadas en Chichén Itzá son el dios guerrero Tezcatlipoca y Tlalchitonaiuth, deidad asociada al Sol. El sistema sociopolítico fuertemente militarizado se manifiesta en los múltiples bajorrelieves.

Contenidos relacionados