Nelson Mandela

Compartir


Datos principales


Tipo

Político

Fecha nacimiento

11-6-1918

Fecha muerte

5-12-2013

Cargo

Presidente

Desarrollo


Tras estudiar en el Fort Hare College, es aquí donde entra en contacto Oliver Tambo y e inicia su primera participación política, al participar ambos en una huelga estudiantil por la que fueron expulsados. Posteriormente conoce a Walter Sisulu, quien le facilitará un trabajo en una firma de abogados. Su participación política continúa, creando en 1944. una rama juvenil del Congreso Nacional Africano (en inglés, ANC), organización que lucha por la defensa de los derechos de la minoría negra en Sudáfrica. Junto a él, figuran Sisulu, Tambo y Antón Lembede, aunque Mandela pronto se convierte en el máximo dirigente del movimiento. La estrategia que propugnan tiene un fuerte contenido radical y etnocéntrico, por cuanto en principio sólo defienden los derechos de su propio grupo. Sin embargo, a partir de 1952, con motivo de la "campaña del desafía", Mandela pasa a defender la unión de los distintos grupos culturales de raza negra en para desarrollar una estrategia común en defensa de sus intereses y en contra de la política del "apartheid". La actividad militante de Mandela le hacía no sólo participar en las actividades de la organización sino que también le llevó a fundar un despacho de abogados, el primero regentado por negros. Conocido activista, ya es muy notoria su oposición al gobierno y su participación en actos radicales. Por ello, el gobierno sudafricano ordena su detención en diciembre de 1952, aplicando la Ley de Represión del Comunismo, en virtud de la cual se le condenará nueve meses de prisión.

Más tarde, aunque la condena no es aplicada, se sustituye por la prohibición de participar o acudir a actos políticos y a no poder salir de Johannesburgo, pena que será constantemente renovada durante los nueve años siguientes. La condena y el seguimiento de que es objeto por parte de las autoridades policiales no impide que siga mostrando una actividad frenética a favor de los derechos de los negros, colaborando con el Congreso Nacional Africano. Nuevamente detenido, fue acusado de traición y procesado en diciembre de 1956 junto a otras 156 personas, en un juicio que terminó en 1961 con una sentencia absolutoria. Una manifestación en protesta por la muerte de 56 personas en Sharpeville a cargo de la policía sudafricana fuel detonante para que el Congreso Nacional Africano y el Congreso Panafricano, otra organización similar, fueran prohibidos. Mandela, que preveía una nueva detención y condena, hubo de esconderse y vivir de manera clandestina. Durante esta etapa, se dedica a recorrer el país junto a Sisulu, con el objetivo de organizar tres días de huelga. La cerrazón del gobierno y la brutal respuesta policial a los actos reivindicativos decidieron a la dirección clandestina del ANC a emprender la lucha armada. Estamos en 1961, y se inaugura así un periodo de enfrentamiento que se prolongará durante largos años. Para organizar la lucha, el ANC crea el grupo Umkhonto we Size ('La lanza de la nación'), dirigido por Mandela. Para recabar apoyo internacional viajo a Dais Abeba, donde se estaba celebrando en 1962 la Conferencia Panafricana.

Más tarde, se desplazó a Argelia para recibir entrenamiento guerrillero y a Londres, donde contactó con la comunidad de exiliados sudafricanos. A su vuelta a Sudáfrica ese mismo año, fue detenido y condenado a 5 años de cárcel por el delito de rebelión y por salir ilegalmente del país. Encarcelado, un registro policial en la sede del ANC en Rivonia halló el diario de Mandela, en el que explicaba sus actividades durante sus viajes al extranjero. Por ello, junto a otros activistas, fue nuevamente juzgado, recayendo sobre él esta vez la pena de cadena perpetua. Durante el juicio, entre octubre de 1963 y junio de 1964, él mismo se encargó de su defensa y de la de sus compañeros, si bien eso no impidió que hubiera de pasar en la cárcel más de 25 años. Su estancia en prisión movió el apoyo de gran parte de la comunidad internacional, que le convirtió en un símbolo de la lucha contra el "apartheid" y la discriminación racial. Tras pasar dieciocho años en la prisión de Robben Island, fue en 1982 recluido en la de Pollsmoor (Ciudad de El Cabo). La presión internacional logró que el presidente sudafricano Pieter Botha le ofreciera en 1986 la libertad condicional, oferta que Mandela rechazó por cuanto no conllevaba una apretura del régimen hacia la igualdad racial. La situación no cambió sino hasta la llegada en 1990 de un nuevo presidente, Frederick de Klerk, quien legalizó el ANC y liberó a Mandela en febrero de ese mismo año. No obstante, aun quedaba mucho camino por recorrer, por lo que Mandela, puesto al frente del ANC, hubo de negociar con el gobierno las bases para la reforma, todo ello en medio de un clima de fuerte enfrentamiento social entre los propios grupos negros y el miedo de la minoría blanca al desencadenamiento de represalias una vez que estos pudieran llegar al poder.

Llegadas a buen término, el resultado supuso la derogación del régimen racista aunque no la igualdad económica, pues la mayoría de la población negra se encuentra en una situación cercana a la pobreza. Mandela y De Klerk recibieron el premio Nobel de la Paz en 1993. Unas elecciones generales celebradas en mayo de 1994, en las que participaron todos los grupos, dieron el poder a Mandela, que se convirtió así en el primer presidente negro de la historia de Sudáfrica. Desde entonces, Mandela es uno de los líderes mundiales más relevantes, con especial significación en el continente africano. Desde su cargo, ha ejercido como mediador en varios de los conflictos que asolan a la región, como el del Zaire que puso fin al mandato de Mobutu Sese Seko. En 1999 terminó su mandato y se retiró de la vida política, teniendo escasas apariciones públicas, la última en el Mundial de Fútbol de 2010 celebrado en su país. A lo largo de 2013 sufrió diversos problemas de salud por su avanzada edad, muriendo finalmente el 5 de diciembre de 2013. La noticia causó gran consternación en todo el mundo y a sus funerales asisten más de 50 jefes de estado.

Contenidos relacionados