Lateral izquierdo de la capilla Brancacci

Datos principales


Autor

Tommaso di Ser Giova Mone Cassai

Fecha

1424-28

Estilo

Renacimiento Italiano

Material

Fresco

Museo

Iglesia del Carmine de Florencia

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La capilla Brancacci es la obra maestra de Masaccio, con la que se abandona definitivamente el lenguaje goticista y se da paso al Quattrocento. Es un encargo de uno de los miembros de la prestigiosa familia florentina de los Brancacci, llamado Felice, en cuyas manos estaba el patronato de la capilla desde 1386. Felice Brancacci era un próspero comerciante de sedas que se introdujo en política, siendo nombrado Cónsul del Mar en 1421 y embajador en El Cairo en 1422. A su regreso a Florencia fue comisario florentino ante las tropas que asediaban Brescia dentro de la alianza entre Florencia y Venecia contra Milán. En 1432 se casó con Lena, hija de Palla Strozzi, uno de los hombres más ricos de la ciudad. La familia Brancacci cayó en desgracia a partir de 1436, siendo desterrado Felice por participar en el grupo anti-Médici. Deseoso de demostrar su poder, encargó la decoración de la capilla a la derecha del transepto de la iglesia de Santa María del Carmine a los mejores artistas de Florencia. Posiblemente los trabajos comenzaron en 1424, iniciándolos Masolino, incorporándose Masaccio pocos meses después y haciéndose cargo del conjunto en solitario cuando Masolino se trasladó a Hungría en el verano de 1425. Tres años más tarde, Masaccio marchaba a Roma sin concluir el encargo, recuperado años después por Filippino Lippi. El conjunto ha sufrido diversas modificaciones a lo largo del tiempo, eliminándose algunos tramos.

En 1680 el marqués Ferroni pensó en adquirir la capilla y eliminar los frescos, motivando la intervención de la Gran Duquesa Vittoria della Rovere, quien impidió la destrucción. En enero de 1771 un incendió devastó la iglesia aunque afectó ligeramente a la capilla. Desde inicios del siglo XX se ha procedido a la ejecución de diversas limpiezas y restauraciones para dejar en perfecto estado esta obra maestra de la pintura universal. Los frescos se ordenan en dos cuerpos superpuestos continuando con la composición tradicional empleada en la decoración de las iglesias florentinas. Las composiciones asemejan a cuadros trasladados al muro, enmarcadas por pilares clásicos pintados, estableciendo una perfecta simetría entre ellas. La temática gira en torno a la historia de la vida de san Pedro, patrón de los marineros y comerciantes del mar - entre los que encontramos a Felice Brancacci - incluyéndose algunas referencias al Génesis, concretamente la historia de Adán y Eva. En este lateral izquierdo de la capilla contemplamos las siguientes escenas: en el compartimento superior la Expulsión del Paraíso pintado por Masaccio, El Tributo también de Masaccio y la Predicación de san Pedro pintada por Masolino; en el compartimento inferior encontramos a San Pedro en la cárcel visitado por San Pablo, obra de Filippino Lippi, la Resurrección del hijo de Teófilo y San Pedro en la cátedra pintado por Masaccio y Filippino Lippi, y San Pedro curando a los enfermos con su sombra también de Masaccio.

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