Desarrollo
Intervino en las actividades que se desarrollaron en el Mediterráneo durante la Segunda Guerra Mundial. Prácticamente al comienzo del conflicto, su propia tripulación se encargó de hundirlo en Tolón, ante la amenaza de que las fuerzas alemanas se apropiaran de la flota francesa. Tras procederse a su reflotación, fue reestructurado y empleado como buque almacén. Aunque se trató de reconvertirlo en portaaviones, finalmente no se llevó a cabo esta operación. En 1950 pasó al desguace.