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Datos principales


Rango

Edad Moderna

Desarrollo


Como ha escrito Jorge Sebastián, las mujeres de sangre real ocuparon un lugar paradójico, central y periférico a la vez, en los discursos sobre el poder de la monarquía hispánica. Su posición estuvo siempre subordinado al elemento central de la monarquía, el rey, fuese éste su esposo, su hermano, su padre o su hijo. Justificadas por el rey, eran a su vez pilares fundamentales de todo el sistema, en cuanto garantes de la legítima transmisión del poder dentro de la dinastía. (59) Gráfico Las identidades femeninas regias se construyeron a través de toda una gama de recursos persuasivos. Las imágenes fueron uno de estos recursos, quizá no el de mayor peso, pero sí uno muy efectivo y gran capacidad de resonancia. Las imágenes, nada inocentes ni espontáneas, se atuvieron más al ideal que a la realidad, si bien es cierto que ambos polos no anduvieron nunca muy separados en la vida de aquellas mujeres. Estas imágenes, no todas de carácter artístico, proporcionan una vía de entrada a la Corte española de los siglos XVI y XVII.

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