Samoa

Compartir


Datos principales


Tipo

Región geográfica

Antecesor

Oceanía

Localización


Desarrollo


Archipiélago de Oceanía, dividido políticamente en Samoa norteamericana u oriental y Samoa occidental, ésta última independiente. Situada en el mismo corazón del Pacífico meridional, a unos 3700 km. de Hawaii, se extienden las cinco islas y los dos atolones que forman la Samoa americana e, inmediatamente al oeste, encontramos las islas de la Samoa occidental. La mayor parte de ellas están cubiertas de una espesa y exuberante vegetación tropical. No se ha podido todavía establecer con seguridad el lugar de procedencia de los primeros polinesios que colonizaron Samoa, aunque la teoría más aceptada es que procedían de las Indias orientales, concretamente de Malasia o Filipinas. Los samoanos, sin embargo, tienen una opinión diferente, ya que se consideran originarios de la propia Samoa y cuna de la cultura polinesia. Según su teoría, serían la raza deseada por el dios Tagaloa cuando éste creó el mundo. Los restos arqueológicos datados mediante Carbono-14 que presentan una mayor antigüedad son los de un pequeño asentamiento en la isla de Upolu (actualmente Samoa occidental) del 1000 a.C. Samoa fue descubierta en 1722 por J. Roggeveen y, en 1768, recibieron el nombre de archipiélago de los Navegantes. En el primer tercio del siglo XIX llegaron los primeros misioneros ingleses y en 1878 comenzó la influencia extranjera al establecer los norteamericanos una base naval en Pago Pago. Los jefes de las tribus mantuvieron su poder hasta que la explotación de las islas por parte extranjera trajo consigo disputas y enfrentamientos entre los principales mandatarios.

En 1889 pasaron a ser un Protectorado de Alemania, Estados Unidos y Gran Bretaña; sin embargo, diez años más tarde sólo los Estados Unidos (Tutuila Manua y Rose) y Alemania (Sawaii y Upolu) mantenían posesiones en ellas. En 1914 las posesiones alemanas fueron conquistadas por una expedición neozelandesa y australiana y, con el final de la I Guerra Mundial y el Tratado de Versalles (1919), pasaron a constituir un mandato de la Sociedad de Naciones confiado a Nueva Zelanda hasta 1958, año en que pasó a ser un Estado autónomo. Finalmente, alcanzó su independencia en 1962, mientras la otra Samoa sigue dependiendo de los Estados Unidos desde 1900 hasta la actualidad, sin que exista demasiada presión para su unificación. A pesar de las diferencias políticas y económicas surgidas en el último siglo, ambas Samoa tienen en común su cultura tradicional. La civilización samoana estaba ya asentada antes de la llegada de los polinesios, hacia el 800 a.C. y, si bien la mayor parte de la población actual es cristiana, todavía se conservan algunas de sus formas de vida tradicionales y culturales.

Contenidos relacionados