Esquema relacional
El toscano Bartolini es el más personal de los escultores italianos de su época. Aunque se formó en círculos estrictamente clasicistas (David, Lemont, Canova), en sus esculturas hace manifiesta su concepción más naturalista de la plástica, esforzándose ocasionalmente en la expresión de las calidades y buscó una inflexión historicista por la recuperación de los modelos plásticos del quattrocento florentino. Por ejemplo, este monumento a la condesa Zamoyski en Santa Croce, o, más intimista, el magnífico busto que realizó de su esposa en 1831. No es el caso de esta devota escultura, en la que observamos el otro ingrediente que lo separa de sus antecesores: la afinidad con una poética piadosa sin afán épico.