Compartir


Datos principales


Rango

XX10

Desarrollo


La dureza de los temas de Dix -los mismos que en las obras de Grosz- se acentúa por su forma de presentarlos: fría y minuciosa. Dix narra con lucidez, sin hacer concesiones al espectador, lo que vio en la guerra. Voluntario para ver y aprender, una vez acabada la guerra seguirá viendo los mismos, o semejantes horrores en la vida diaria, en la realidad torturada de la posguerra alemana.Para hacer la serie de grabados Der Krieg (La Guerra, 1924), que permanecieron ocultos hasta 1962, estudió a Callot y a Goya. "Era fabuloso -escribe- ... cómo la materia humana se transformaba de una manera demoniaca". Dix expone las carnicerías, las matanzas, sin indagar las causas; simplemente describe. Asustado por su propio temperamento -son sus palabras- se recrea él también en la pintura de la violencia urbana, de asesinos y prostitutas.Proletario por origen y por convencimiento, realizó innumerables retratos con un realismo implacable, atento a los menores detalles, con una minuciosidad exagerada, que ofrecen un panorama de la Alemania de los años veinte, en la génesis del nazismo, sólo comparable en su gélida disección a los retratos fotográficos de Sander.Catedrático en Dresde hasta 1933, se retiró a vivir junto al lago de Constanza y allí hizo retratos y pintura decorativa.

Obras relacionadas


Contenidos relacionados