Tholos de Atenea Pronaia (Delfos)
Una de las más bellas construcciones del siglo IV es la thólos de Atenea Pronaia en Delfos, obra circular de uso desconocido, con veinte columnas dóricas en el exterior y diez finísimas columnas corintias sobre un banco corrido en el interior. A primera vista, era un edificio lleno de novedades, empezando por su misma planta circular, que no se usaba, al parecer, desde la época arcaica, y que tendría gran éxito en la generación siguiente y aun en siglos venideros. Para exponer sus hallazgos en esta obra, Teodoto escribió incluso un libro, según nos relata Vitruvio . Pero todo ello no obsta para afirmar que, en realidad, nos hallamos en la línea de las investigaciones que se realizaban a fines del siglo anterior: las columnas internas encajadas en el muro, el simple uso del orden corintio (aunque con capiteles muy esbeltos y novedosos), el manejo de piedras de distintos colores, todo nos traslada de forma sistemática a obras como el Erecteo o el templo de Apolo en Basas. Acaso Teodoto, en su juventud, hubiese trabajado con Ictino en esta última obra.