Danae

Datos principales


Autor

Tiziano Vecellio

Fecha

1545-46

Escuela

Venecia

Estilo

Renacimiento Italiano

Material

Oleo sobre lienzo

Dimensiones

120 x 172 cm.

Museo

Pinacoteca de Capodimonte

Contenidos relacionados


En octubre de 1545 Tiziano se trasladó a Roma donde permaneció hasta 1547. Durante el tiempo que estuvo en la ciudad pontificia realizó diversos retratos como el del cardenal Farnese, el de Pier Luigi Farnese con armadura y el de Paulo III con sus nietos. Contempló las obras de Miguel Angel y ejecutó uno de sus manifiestos pictóricos: la Dánae. De esta manera se reafirmaba en su concepción pictoricista de la pintura, abandonando el plasticismo para entrar en una nueva fase de brillantez cromática.Dánae era hija de Acriso, el rey de Argos. El oráculo de Argos había predicho que el hijo de Dánae mataría a su abuelo por lo que Acriso decidió encerrar a su bella hija en una cámara subterránea de bronce. A pesar de sus esfuerzos por esconderla, Zeus se prendó de su belleza y sedujo a la joven en forma de lluvia dorada. De este encuentro nació un niño llamado Perseo, por lo que Acrisio encerró a su hija y nieto en un cofre y lo arrojó al mar. El cofre llegó a la isla de Céfiros donde fue recogido por Dictis, hermano del tirano Polidectes. Tal y como había predicho el oráculo, Perseo mató a su abuelo.Se considera que la protagonista sería una cortesana de la que estaría enamorado el cardenal Farnese, quien posiblemente encargaría la obra. Tiziano toma como modelos a la Leda de Miguel Angel y la Dánae de Correggio. La desnuda Dánae aparece reclinada sobre una amplia cama cubierta de almohadones, dirigiendo su atractiva mirada hacia la lluvia dorada que observamos en la zona superior de la composición.

Cupido con su arco y sus flechas acompaña a la joven. La iluminación dorada baña la sensual figura, creando un acentuado contraste con el fondo, donde observamos un celaje en el que apreciamos la luz crepuscular. La gama de colores empleados se ha hecho más reducida que en obras anteriores, apreciándose desde este momento cierta tendencia a la economía cromática. Las pinceladas son más rápidas y empastadas, inaugurando un estilo denominado "impresionismo mágico".Alrededor de esta tela existe una anécdota relacionada con la visita de Miguel Angel al taller del maestro veneciano en el Belvedere. El florentino, hablando sobre la obra de Tiziano "dijo que le gustaba mucho su color y su estilo, pero que era una lástima que en Venecia los pintores no empezaran por dibujar bien y que no emplearan un sistema mejor".

Compartir