Iglesia de San Ildefonso

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Datos principales


Fecha

Siglo XIX

Autor

Julián Barcenilla

Lugar

Sevilla

Localización

Sevilla

Localización


Desarrollo


Se trata de uno de los templos modernos de Sevilla, concluida a principios del siglo XIX; su historia, sin embargo, se remonta a principios del siglo V. En 1649, se reutilizaron las viejas fosas comunes que había en ella con motivo de la terrible peste que asoló la ciudad. Las últimas excavaciones han descubierto una lápida de la cultura visigoda que atestigua la fundación de un lugar para el culto cristiano en el mismo sitio que hoy ocupa San Ildefonso. Parece claro que los musulmanes utilizaron el antiguo lugar de culto visigodo para erigir una mezquita, pues existen documentos de la época en el archivo del Monasterio de Santa Clara que demuestran su existencia, así como la de unos baños árabes que lindaban con ésta. El antiguo templo, probablemente del siglo XIV, fue demolido debido al deterioro de su fábrica. La nueva construcción tomó elementos ya pensados por la familia Figueroa, lo que da cierto barroquismo a la construcción, teniendo también elementos neoclásicos, como la concepción espacial del edificio y la superposición de órdenes completos, apreciable en su fachada. La portada del templo se caracteriza por su monumentalidad, ya que aparece flanqueada por esbeltas y hermosas torres. El trazado de la iglesia es de Julián Barcenilla, llevándolo a la práctica José de Echamorros, quien la terminó en 1841. Dentro de la iglesia está conservada la Virgen del Coral, que presenta grandes influencias del gótico sienés del Trecento.

El interior está dividido en tres naves con cabecera profunda presidida por un templete neoclásico del siglo XIX precediendo al coro, de la misma fecha, sobre el que se disponen tres hornacinas con las efigies de San Pedro, San Ildefonso y San Pablo, pertenecientes al primitivo retablo realizado por Felipe de Ribas en 1636. En el crucero se puede ver un altar también neoclásico con la imagen del Cristo Cautivo, obra anónima del siglo XVIII, que cuenta con gran devoción entre los sevillanos. Ya en la nave aparece el retablo de la Virgen de los Reyes, talla anónima del siglo XVI a la que rinde culto la hermandad de los Sastres; esta corporación es la más antigua de la ciudad. Junto a la virgen aparecen dos imágenes representando a San Hermenegildo y San Fernando, ambas de Pedro Roldán, del último tercio del siglo XVII.

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